Párpados, a cirugía

Uno de los campos de la cirugía plástica estética  que más ha aumentado la demanda tanto por parte de mujeres como de hombres es la cirugía de los párpados (blefaroplastia). Su fin: reducir las bolsas de los párpados inferiores, elimina el exceso de piel de los párpados superiores y devolver vitalidad a la mirada, mejorando las forma “almendrada” de los dos párpados

Este tipo de cirugía estética facial generalmente se realiza para tratar de paliar el paso de los años. De hecho, a medida que la piel envejece, pierde gradualmente su elasticidad. La falta de ella, más la gravedad, hace que se acumule una piel excesiva en los párpados superior e inferior. Parte del éxito de este tipo de intervención facial es que mejora el aspecto de la mirada, logra rejuvenecer el rostro, aporta luminosidad y elimina la apariencia de cansancio por exceso de piel o bolsas en los párpados.

Tipos

 En ocasiones, este exceso de  piel puede llegar a interponerse en el campo visual. Existen varios tipos de blefaroplastia. La inferior (tratamiento de los efectos de la edad. Se suele llevar a cabo mediante la extracción del exceso de grasa que da lugar a las bolsas y en casos determinados, también, se puede corregir el exceso de piel; la superior, destinada a paliar el envejecimiento de los párpados superiores que se caracteriza principalmente por exceso cutáneo y la completa, que combina el tratamiento de párpado superior e inferior en aquellos pacientes que lo requieren.

Este tipo de cirugía plástica estética suele llevarse a cabo en mujeres y hombres a partir de los 35 años aunque en determinados casos, cuando existen antecedentes familiares de este problema estético, es probable que la intervención se produzca con anterioridad. Es importante que los pacientes acudan a cirujanos expertos y cualificados para este tipo de procedimientos y que no se generen falsas expectativas. También deben saber que la cirugía del párpado superior puede durar por lo menos diez años, mientras que la del inferior rara vez debe repetirse. No obstante, y lógicamente, los ojos seguirán envejeciendo.

La cirugía

La intervención puede realizarse en dos horas (si se lleva a cabo tanto el párpado superior como el inferior) y bajo anestesia local con sedación  (o total si el paciente así lo solicita). La vuelta a la normalidad se puede producir entre siete y diez días después de la intervención. El paciente tendrá que usar hielo en casa, pequeñas almohadillas de gasa, gotas para los ojos o lágrimas artificiales y analgésicos. Es importante que el cirujano estético valore ciertos factores de riesgo que pueden obligar a denegar la intervención. Por ejemplo,  los fumadores tienen un mayor riesgo de complicaciones quirúrgicas porque sanan más lentamente, también es más complicada en personas de ascendencia asiática debido a la estructura única de los párpados de este grupo étnico. Por esta razón, los asiáticos podrían estar en mayor riesgo de tener resultados menos que óptimos que otros grupos étnicos.

Asimismo se debe valorar la existencia de otros posibles factores de riesgo quirúrgico, como problemas de ojo seco, enfermedad ocular tiroidea y diabetes.

Lo más importante, como en todos los tipos de cirugía estética y reparadora, es ponerse en manos de especialistas experimentados. Nuestro equipo está dispuesto a aclarar cualquier duda sobre este procedimiento y asesorar convenientemente a los pacientes y a sus familiares.

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